jueves, 13 de agosto de 2015
Dias de aventuras
Hola querid@s!!
Busco huecos para poder contaros como va todo pero la conexión a intenert en esta parte del viaje y tanta actividad fuera del hotel me ha complicado poder teneros al tanto, así que me salto algún post y os cuento lo más relevante antes de salir hacia nuestro próximo destino dejando atrás las peripecias y aventuras de Ubud.
El día de ayer, desde la tranquilidad que dan las agujetas del superviviente, lo definiría como Aventurero,pero ayer lo habría descrito como terrorífico.
Todos aquellos que me conocéis sabéis que me he visto inmersa en situaciones de lo más variopintas a lo largo de mi vida, pero jamás, ni siquiera cuando volqué mi coche en plena avenida de torneo y fui rescatada por un regimiento de bomberos, temí por mi vida. Hasta ayer. Ayer sí.
Yo realmente creí que el porcentaje de posibilidades de morir en medio de un volcán del Bali profundo, era mucho mas alto que el de llegar a la cima viva, y es que veréis; yo imaginaba que lo de subir al Volcán, pues sería tipo excursión subir al Teide. Cuando escuché la palabra trekking,ya debí haber desconfiado y preocuparme más por saber a que me enfrentaba, pero dado que estaba en plan,"yo voy dejarme llevar" y que en mi inocencia pensé que de ser una actividad que supusiera algún riesgo para la vida humana nos avisarían, o nos darían una serie de pautas a tener en cuenta, creí que subiría al volcán como la que sube a la azotea a tender. ERROR N1
La jornada comenzó a las 2:00 de la mañana,y el ruta seria nocturna para que así vieramos amanecer en el cráter. Que bonito. ERROR N2.
Sin haber pegado ojo, cosa que os contaba en el post que omito, me coloco un calzado cerrado y cómodo ( apropiado para morir ) ERROR N3 y N4. Y me digo venga hale! Vámonos para el volcán!
Y la aventura comienza así (así de mal): Me meten en una furgoneta negra,en donde cuyo interior había una mezcla de olor a hombre y comida picante y especiada que aun en ayunas me provocó una arcada, ilusa de mi que creí que eso era lo peor del trayecto, ya en esa furgoneta antes de ver si quiera la montaña de lejos, pensé por primera vez en el día -noche que nuestra integridad física estaba en riesgo.
Ibamos en el escuadrón de la muerte, el conductor se ve tenia frustrada la vocación de piloto de fórmula1 y a una velocidad para nada necesaria y tomando las curvas como si rodáramos una película de acción,yo empecé a rezar por dentro el jesusito de vida y ahogo un grito ( solo se escapó un aaaaaay algo ridículo) cuando esquivamos a golpe de volantazo a un gato que paseaba por en medio de aquellas calles que no me atrevería a denominar carreteras. Pero queridos míos,no fue al único ser vivo que casi atropellamos, no.Resulta que en Ubud hay mas perros (callejeros) que personas y se dedican a salir en grupos de 4-5 en mitad de la noche queriendo ser atropellados. Os juro que esquivamos al menos 13 o 14 grupos de perros en todo el trayecto, a golpe de pitido o luces largas los pobres animales nos abrían hueco.
Yo dejé el jesusito de mi vida, poco contundente para la ocasión y empecé el primer misterio del rosario. Ya en el volcán me quedé sin saber que rezar.
Paramos a desayunar antes de comenzar la subida al volcán en cuatros mesas mugrientas con tablones de pladur por paredes,nos preguntan que si querermos cafe (kopi) o té, y yo como deseaba reaccionar me decidí en primer monento por el kopi, (cuando pueda insertar fotos en las publicaciones entedereis por que dije yo, que el coppi ese no me lo bebia por nada del mundo). Pedí un té,que me pareció mas limpito,o eso me dije para autoconvencerme y me lo bebí para intentar entrar en calor; el pelete de la madrugada recorría todo mi cuerpito.
Tras el desayuno de campeones que completaron con unos creps de plátano ( ricos) continuamos rumbo al volcandeloscojones.
Llegamos, noche cerrada, frío, mas frío, un autóctono de allí me viene a decir que arriba hace mas frío aun, alquilamos una sudadera usada, me da hasta igual.Como dice el padre del noprincipe,a la mili me hacia falta ir para tener menos tonterías. Punto de razón para él porque me la habría puesto hasta sin oler a limpio ( como olía menos mal)
Ví otros grupos de aventureros y los ví muy preparados y está demasiado oscuro para que yo vislumbre hasta donde voy a subir ( mas de 1.700 metros para vuestra información)
No dieron un chusta de linterna,de esas que casi podría ser un llavero, y comenzamos la marcha... Al principio bien, en llano, andando a paso bastante rápido se me empieza a desentumecer el cuerpo y me sobra la sudadera usada, 20 minutos después yo ya hubiera hecho una paradita, pero no era el camino del Rocio no, ni había carro que me esperara con una cerveza. Empiezan las cuestas, pero no una cuesta así de mierda,no, una cuesta que yo no la subiría ni en coche. Nos dice entonces uno de los guías que nos acompaña que aun queda hora y media que es cuesta y después subiendo entre pedruscos. Le deseé un herpes.
En ese punto, ya soy consciente de la imprudencia tan grande que estamos cometiendo,y que no estamos preparados ni fisicamente para ello, ni llevamos la ropa ni calzado adecuado, a todo esto, no olvidéis que yo sigo sufriendo la regla mas apocalíptica de mi vida.
Empiezo a recordar todos los titulares de los telediarios sobre montañistas rescatados, perdidos y muertos, y que casi todos tienen como denominador común la imprudencia. Como yo.
Llega un punto de la subida que no puedo mas, de verdad que no, me duelen las piernas y tengo el corazón desbocado, me cuesta respirar y prefiero estar en cualquier otro lugar del mundo menos allí, me da exactamente igual que en la cima del volcán encontremos el nirvana, no me compensa, y lo peor es que ya estamos en un punto de no retorno. No se aún bien como consigo subir toda la parte de cuesta, y comenzar a subir entre pedruscos y precipicios...y ahí sí, ahí siento miedo, miedo de verdad, pienso que yo soy muy torpe y que seguro que me mato, que me he venido al culo del mundo a morirme haciendo algo que no me gusta. Gimoteo. Me desespero. Peto. Me adelanta gente super motivada disfrutando de la experiencia, a los que quería gritarles: INSENSATOOS! Como si fuera Gandalf, pero no tengo aire para respirar imaginar para gritar. La guía, que es una tía que sube la montaña como si la hubieran criado en medio del volcán una manada de monos, me coloca su linterna sudada en la cabeza, asquito extremo,pero me da igual también, necesito ver donde piso, y empiezo a medio escalar a subir cogida a su mano.
La hora mas larga de mi vida, cuando no pensaba que me iba a morir yo,pensaba que se iba a morir Paco, y se me escapaban una lagrimita de pura ansiedad, sobrepasada por las circunstancias se llama la película.
Imaginé a Matías Pratt dando el titular, recordaba todos los discursos de mi padre sobre tener cuidado, intentaba acordarme de todos los consejos de mi amiga elena y de mi exranadecharca, para sobrevivir en una escalda y en una montaña, y solo me acordaba de no se que mierda del musgo en los arboles y que se baja con los pies de lado, y de como encontrar el norte, para que me vale a mi encontrar el norte??? El norte lo había perdido yo al decidir subir aquello.
Le pregunte a la guía que no me soltaba la manita, que si había muerto mucha gente subiendo esto, que era muy peligroso, y me dice la tía, que sí, que muchas personas. Y se queda tal cual. De no ser por que necesitaba su ayuda la hubiera empujado de puro coraje. Donde ha quedado lo de mentir para hacer sentir bien a las personas??
Cuando llegamos a la cima, gracias a dios y a mi angel de la guarda que lo tengo superexplotado y al que había encomendado también el bienestar del noprincipe, el amanecer que nos esperaba era una caca pinchá en un palo, no se me ocurre expresión mejor para explicarlo, pues el cielo estaba todo encapotado por el volcán cercano que había estado en erupción semanas atrás. Y no lo avisan?? Y no devuelven el dinero?? He podido morir para ver nubes??
Nos dió por reírnos vete tu a saber porque.
Cuando se aclaró aquello un poco, era bonito no diré que no, pero vamos que pongan un telecabina y seria igual de bonito y menos peligroso. Allí vimos muchos monos, el cráter del volcán y gente super motivada que parecía estuvieran viendo el amanecer de su vida, que para nada, en ese momento me dije, pues va a resultar que no tengo tan poco mundo oye, por que amaneceres mejores y mas seguros que ese, muchos a dios gracias.
Aun quedaba bajar, que ya lo hacías a luz del día y mucho mas consciente de la hostia que te dabas como resbalaras.
Yo lo pasé mal, puedo afirmar y afirmo que no soy de montaña y seguiré siendo siempre de centro comercial.
Por la tarde y tras dormir cual bebe, fuimos al pueblo de Ubud a ver el monkeyforest, templo lleno de monos y para los monos, donde si disfruté pues te pierdes en la jungla y no te juegas el cuello.
Este Post termino de escribirlo desde Uluwuntu, nueva parada de nuestro viaje, de nuevo en la piscina y de donde he decidido no moverme.
Veréis, lo estoy pasando bien de verdad que si, pero he tenido la mala suerte de que me coincida con darlo todo en ser mujer, y en circunstancias especiales y desconocidas además y esta siendo muuuy largo, estoy muuuuy cansada, aun bastante dolorida he hinchada y necesito un poquito de estar tirada tranquila y no esforzarme por entender a nadie, no siempre puede una estar en la cresta de la ola, ademas quiero intentar hablar con mi familia con la que no he conseguido hacerlo desde que salimos de Singapur, y escribir un buen rato que me apetece, además y para terminar de dejarme el cuerpecillo cortado con el que había amanecido me he enterad ha muerto la madre de un amigo al que aprecio de corazón, y me ha llenado de pena no poder abrazarlo, y de rabia, que le pasen cosas así a gente tan buena. La vida es injusta,no termino de querer creerlo porque esa certeza me asusta, pero a veces con cosas así comprendes,que no todo tiene por que tener sentido, y que no, no todo sucede por una razón. A veces la vida es una mierda sin más.
Para no cerrar la publicación con mal sabor de boca, os cuento que en la jornada de ayer también visitamos un templo en un acantilado maravilloso donde me sentí una chica muy malota, pues estaba terminantemente prohibida la entrada a las mujeres con la menstruacion, vaya pamplina, yo me pasee por allí a todo lo que daba el templo, y fue genial el look del no principe con una especie de pareo y fajín para poder entrar. Cuando llegue a Singapur publicaré todas las fotitos que desde el movil no puedo insertar, ya veréis que sitios tan maravillosos estamos viendo y que cara de enamorada que tengo, jijiji. Y será que hoy estoy tiernita, coscona y de aquella manera, que os diré que de las cosas que le diría hoy a mi ultimo sapo al que tengo aquí al lado estudiando aleman ( susurra de repente por lo bajini algo en alemán que a mi me parece esta haciendo un conjuro y da yuyu) que está muy guapo con esos cachetes colorados, que me encanta esa cara de concentración que pone, y que está siendo,aun con sus tropezones como los tenemos todos, la mejor versión de el mismo que hubiera podido imaginar.
Que bonito es querer así, como quiero yo hoy, y ayer y mañana...
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